CNE y Universidades

["Chela Vargas" <vargasch@cantv.net>]

 

 

 

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                                        La trampa de las élites.

                                                                                 Chela Vargas

Los rectores  de las Universidades Simón Bolívar,  Católica Andrés Bello, y Central de Venezuela autonominadas,”universidades de alto nivel” pretenden imponer, como única, su metodología para evaluar el REP. Esto significa entonces, que la participación de las otras universidades, Bolivariana, Experimental de Yaracuy, Rómulo Gallegos, Simón Rodríguez y el Instituto de  Investigaciones científicas  no tiene ningún valor, Hay entonces, universidades  de primera y  universidades de segunda. Las primeras tienen una existencia de “alto nivel” mientras que las segundas son  “prefabricadas”:

Afirmando que el CNE provoca  una  “desconfianza institucional”, se erigen como garantes únicos de resultados electorales “legítimos y confiables”.El hecho de representar a  las universidades de “más alto nivel del país” los hace acreedores de meritos académicos, políticos e intelectuales para ser  “portadores  de una  racionalidad política que los bautiza como los únicos capacitados para  “dictar la verdad, la razón y la ley”. Principio-dogma de la tradición liberal  que consagra la democracia representativa y el dominio político de las élites oligárquicas.    

Sin profundizar en la situación de crisis estructural  que atraviesan nuestras casas de estudio, quisiéramos rastrear en la falacia  “universidades de alto nivel” las pretensiones meritocráticas de sus directivos. Si revisamos el currículo del equipo rectoral de la UCV, por ejemplo, constataremos  la pobreza de su trayectoria intelectual. Empezando por el título de doctor que ninguno de ellos posee, (antes era requisito indispensable).Por supuesto que tampoco conocemos de una importante obra escrita ni proyectos de investigación como resultado importante del proceso enseñanza aprendizaje que avale su trayectoria académica.

También ponemos en entredicho su racionalidad como ciudadanos garantes  de la democracia. Es muy difícil olvidar la  expresión de euforia enloquecida    en la cara del dictador Carmona  y  la expresión  de  entusiasmo con que uno de estos rectores seguía la lectura del decreto-adefesio que borraba de un plumazo todas las instituciones democráticas.

Y por último, ¿Cuál es el ejercicio de  su racionalidad meritocrática que confirma la desconfianza en el CNE? La única encuesta seria conocida al respecto es la referida por Díaz Rangel en una de sus columnas dominicales, en oportunidad  de la elección del nuevo CNE. Mas del 70 % de los encuestados apoyaron  este organismo y el 60% estuvo de acuerdo con que quedara intacta su directiva dirigida entonces por Jorge Rodríguez.

Quítense la mascara señores rectores. Ustedes están muy lejos de representar  valores significativos de  “casas que vencen las sombras”.

Su papel mediático como defensores del REP, carece de legitimidad, es una mas de las falacias de la oposición para justificar su derrota. Su pretendida racionalidad política se quedó empantanada en el individualismo, el pragmatismo y la mentira. Tienen miedo a la rebelión de un pueblo que, armado de racionalidad  política e histórica, construye la  democracia bolivariana participativa y patriótica, y ha demostrado su aguerrida disposición a defenderla.

vargasch@cantv.net

Docente, UCV